- Ayuntamientos impulsan controles y campañas para frenar el exceso de velocidad y proteger a peatones.
- México afronta brechas en formación vial y baja cobertura de seguros, con llamados a exigir capacitación.
- Uruguay avanza hacia una libreta por puntos con sanciones claras y programas de recuperación educativa.
- Ecuador promueve la movilidad segura con iniciativas ciclistas y campamentos infantiles de seguridad vial.
La educación vial vuelve al primer plano con iniciativas públicas que combinan concienciación, controles y formación para todos los perfiles de usuarios. Desde campañas contra la velocidad en España hasta cambios normativos en Uruguay, pasando por el diagnóstico de México y los programas comunitarios en Ecuador, las administraciones buscan reducir la siniestralidad y mejorar la convivencia en las vías.
El hilo conductor es claro: aprender y cumplir. Allí donde se intensifica la información, se refuerzan las normas y se enseña desde edades tempranas, los responsables públicos confían en crear hábitos más seguros al volante, en la bici o como peatón, y en transformar la cultura vial con medidas sostenidas en el tiempo.
Controles y concienciación: Vícar refuerza el respeto a la velocidad
El Ayuntamiento de Vícar (Almería) se ha sumado a una campaña de la DGT centrada en el respeto de los límites de velocidad, con especial vigilancia en los tramos urbanos de mayor riesgo y accesos al municipio. La iniciativa persigue reducir la accidentalidad y proteger a los peatones, los usuarios más vulnerables en ciudad.
Durante la campaña, que se prolonga varios días, se intensifican los controles en el entorno del bulevar y accesos, recordando que el exceso de velocidad es una de las principales causas de los siniestros urbanos con víctimas mortales. Las autoridades locales subrayan que respetar los límites podría evitar un porcentaje significativo de fallecimientos.
Los datos divulgados por la DGT son contundentes: el riesgo de implicarse en un siniestro se multiplica por 12,8 cuando se supera la velocidad permitida, y podrían evitarse hasta 2.200 muertes anuales si se respetasen las señales, sobre todo en vías urbanas.
Además, se incide en el impacto físico del atropello según la velocidad: por encima de 80 km/h, la supervivencia del peatón es muy improbable; a 30 km/h, el riesgo de muerte se reduce de forma drástica. Este recordatorio refuerza el objetivo de la campaña: moderación y prudencia en el casco urbano.
Formación, licencias y seguro: el reto estructural en México
En México, las aseguradoras pusieron el foco en la relación entre formación vial deficiente, alta siniestralidad y escasa protección financiera. La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) subrayó que los accidentes lideran las causas de muerte entre menores de 24 años, al tiempo que 7 de cada 10 vehículos circulan sin póliza. Descubre cómo la tecnología puede mejorar la formación vial para reducir estos riesgos.
La disparidad territorial también preocupa: en la Ciudad de México aproximadamente la mitad del parque automotor cuenta con seguro, mientras que a nivel nacional apenas tres de cada diez vehículos están cubiertos. La combinación de baja cobertura y siniestros frecuentes deja a muchas familias en situación de vulnerabilidad económica tras un accidente.
Los informes más recientes registran en 2022 un total de 377.231 accidentes con más de 250.000 víctimas en el país. Aunque la edad media de los implicados ronda los 43 años, los jóvenes concentran una parte relevante de los casos, especialmente en zonas urbanas y tramos de alta velocidad.
Reforzar la capacitación y la certificación previa al permiso de conducir aparece como palanca clave. Actualmente, solo siete entidades exigen educación vial constante para obtener la licencia, y en muchos territorios no se realiza prueba práctica ni formación formal en el proceso.
Sin un seguro, los afectados deben afrontar los costes con sus propios recursos, lo que puede traducirse en retrocesos económicos de largo alcance. La apuesta de las aseguradoras pasa por ampliar la cultura del seguro en paralelo a programas de educación vial más exigentes.
Uruguay prepara la libreta por puntos con un giro pedagógico
La Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev) de Uruguay plantea un cambio de calado con la implantación de una licencia por puntos inspirada en modelos europeos. El objetivo es combinar sanciones claras con una recuperación formativa que ayude a bajar accidentes, heridos y fallecidos.
El país encara el reto tras un aumento de víctimas en 2024, con 434 fallecidos. La propuesta prevé que quienes ya tengan permiso comiencen con 12 puntos, ampliables a 14 o 15 si pasan periodos sin infracciones. Los conductores noveles partirían de 8 puntos.
Las faltas graves conllevan pérdidas severas: conducir bajo efectos de alcohol o drogas, negarse a las pruebas o participar en carreras ilegales acarrea la pérdida total de puntos y una penalización temporal. Otras infracciones, como usar el móvil o superar el doble de la velocidad permitida, implican la resta de puntos.
Si un conductor llega a cero puntos, no podrá manejar durante tres meses y deberá completar un programa de recuperación que incluye contenidos teóricos y prácticos. Se pretende poner en marcha este plan en corto plazo
La iniciativa contempla además fortalecer la coordinación con las autoridades para potenciar controles, impulsar la educación vial en las escuelas y ofrecer incentivos como descuentos en seguros para buenos conductores. La experiencia española y el apoyo técnico internacional guían este modelo.
Asimismo, se trabaja junto a la Fiscalía para garantizar que las sanciones tras infracciones graves incluyan medidas efectivas que disuadan las reincidencias, además de las multas económicas y la pérdida de puntos.
Ecuador: educación vial sobre dos ruedas y desde la infancia
Ambato en Bici lleva semanas recorriendo parroquias rurales con actividades de sensibilización sobre uso seguro de la bicicleta, convivencia y responsabilidad en el espacio público. La Dirección de Movilidad de Ambato, con apoyo de la ciudad alemana de Ludwigsburg, promueve una movilidad activa y segura en entornos donde compartir la vía exige especial coordinación.
La gira comunitaria “BiciTando” propone sesiones los sábados en dos horarios (09:30-10:30 y 11:30-12:30) y ya ha pasado por localidades como Augusto N. Martínez, Izamba, Unamuncho, San Fernando, Santa Rosa, Juan Benigno Vela, Huachi Grande, Pilahuín y Montalvo. Próximas paradas incluyen Picaihua, Totoras, Pasa, Pinllo, Ambatillo, Quisapincha, Constantino Fernández, Atahualpa y Cunchibamba.
El enfoque es práctico: normas básicas de circulación en bici, señalización, habilidades para reducir riesgos y pautas de convivencia con peatones y conductores. La autoridad busca consolidar una cultura de respeto que baje incidentes y fomente hábitos saludables.
En Loja, el campamento vacacional “Aventura Vial” concluyó con participación de muchas niñas y niños. Durante el programa, realizaron actividades lúdicas y educativas, como pintura, primeros auxilios, visitas al ECU 911 y ejercicios prácticos sobre cruces seguros y comportamiento responsable en la vía.
Las autoridades resaltaron la colaboración de agentes de tránsito, escuelas de conducción y familias para sostener estos programas, que buscan fomentar hábitos responsables desde la infancia.
Los diferentes frentes —campañas urbanas, reformas, formación y proyectos comunitarios— delinean una estrategia compartida: más conocimiento, control y responsabilidad compartida para reducir riesgos y fomentar una cultura de seguridad vial en todo el territorio.