- ChatGPT permite usar apps como Spotify, Canva o Zillow sin salir de la conversación.
- MCP actúa como puente técnico para ejecutar acciones y mantener el contexto.
- Apps SDK y Agent Kit facilitan crear, publicar y monetizar aplicaciones.
- Lanzamiento gradual: primero fuera de la UE, con controles de privacidad reforzados.
El asistente de OpenAI da un giro relevante: ahora las aplicaciones de terceros funcionan dentro del propio chat, sin pestañas extra ni saltos de contexto. El usuario pide algo con lenguaje natural y la respuesta ya no es solo texto, también puede ser una interfaz con botones, listas o vistas que permiten actuar al instante.
La novedad se presentó en el DevDay y abre un ecosistema en el que se invocan desde la conversación. Con una comunidad que OpenAI cifra en millones de desarrolladores y cientos de millones de usuarios, el objetivo es convertir la charla en la nueva capa donde ocurren las tareas digitales del día a día.
Qué cambia en ChatGPT y cómo funciona
La base técnica de esta evolución es el Model Context Protocol (MCP), un estándar que conecta el modelo con herramientas y datos externos. Gracias a él, ChatGPT puede interpretar una petición, ejecutar acciones en servicios conectados y mantener el contexto sin salir del hilo de conversación.
La invocación funciona de dos maneras: mencionando la app por su nombre o mediante sugerencias contextuales que el propio sistema propone si detecta que puede ayudar. Si hablas de música, aparecerá Spotify; si buscas vivienda, el asistente puede recomendar Zillow con un mapa interactivo.
En la primera utilización, hay que autorizar explícitamente la conexión y ver qué datos se comparten con cada servicio. La experiencia se apoya en interfaces ligeras que el chat puede mostrar en línea: menús, tarjetas o vistas previas que permiten completar tareas con un par de clics.
Ejemplos prácticos ya vistos incluyen crear una playlist de fiesta en Spotify, convertir un esquema en una presentación con Canva o explorar inmuebles en Zillow directamente desde el chat. La idea es que el lenguaje sea la interfaz universal y las apps actúen como extensiones que ejecutan lo que pides.
Herramientas para desarrolladores y nuevo ecosistema
OpenAI ha lanzado Apps SDK, un kit que permite crear y publicar aplicaciones para ChatGPT apoyadas en MCP. Los desarrolladores pueden conectar APIs, bases de datos y acciones, y diseñar experiencias con HTML ligero y componentes adaptables para integrarse en la conversación.
Además, la compañía introduce Agent Kit, pensado para construir agentes inteligentes desde cero: guía el proceso end to end (idea, funciones, pruebas y métricas) y prioriza un acceso seguro a los datos para entornos profesionales.
Para la distribución, OpenAI prepara un directorio de aplicaciones dentro de ChatGPT con revisión previa de calidad y seguridad. La hoja de ruta incluye monetización nativa mediante el Agentic Commerce Protocol, de modo que las transacciones puedan completarse dentro del chat cuando la experiencia lo requiera.
La visibilidad también se trabajará desde el propio producto: ChatGPT sugerirá apps automáticamente si encajan con lo que el usuario está haciendo, lo que puede ayudar a escalar productos y alcanzar audiencias masivas sin fricción.
Privacidad, seguridad y disponibilidad
Todas las integraciones deben cumplir las políticas de uso de OpenAI y respetar las normas de los servicios conectados. Se exige transparencia en permisos, recopilación mínima de datos y políticas de privacidad claras, con controles cada vez más granulares para que el usuario decida qué información puede usar cada app.
El despliegue será gradual e inicialmente disponible fuera de la Unión Europea, comenzando en inglés. La función llegará a cuentas de ChatGPT en los planes Free, Go, Plus y Pro, con incorporación a entornos empresariales y educativos en fases posteriores.
Entre los socios iniciales se encuentran Booking.com, Canva, Coursera, Expedia, Figma, Spotify y Zillow. OpenAI prevé sumar más integraciones en los próximos meses, con marcas como Uber, TheFork, Peloton, TripAdvisor, Instacart, DoorDash, OpenTable o Target.
La gestión es sencilla: la primera vez que uses una app, autoriza su conexión y revisa los permisos; después podrás administrar o revocar cada enlace desde la configuración. La meta es ofrecer control y trazabilidad sin sacrificar fluidez en el uso diario.
Todo apunta a que el asistente deja de ser un mero generador de respuestas para convertirse en una plataforma operativa donde el lenguaje dispara acciones reales. Con MCP como puente, un SDK abierto y un directorio en camino, el chat se perfila como un punto único para descubrir, ejecutar y pagar servicios sin salir de la conversación.