- EE. UU. empieza a conceder licencias para exportar el H20 a China, poco después de la reunión entre Jensen Huang y Donald Trump.
- Nvidia había alertado de un posible recorte de 5.500-8.000 millones de dólares; el H20 ingresó 4.600 millones en T1 y China supone el 12,5%.
- China exige pruebas de que no existen puertas traseras; Nvidia niega "backdoors" y funciones de apagado remoto.
- Otros chips avanzados de IA siguen restringidos; detalle de licencias, clientes y valor de los envíos aún no se ha comunicado.
Estados Unidos ha activado la concesión de licencias de exportación para el chip H20 con destino a China, lo que permitirá a Nvidia retomar envíos al gigante asiático. Este movimiento del Departamento de Comercio llega poco después del encuentro entre el CEO Jensen Huang y Donald Trump en la Casa Blanca, aunque sin que se haya divulgado el contenido de esa conversación.
El H20 se diseñó expresamente para ajustarse a los controles de exportación de semiconductores avanzados establecidos durante la administración Biden. La interrupción de ventas había implicado un golpe relevante para la compañía: se habló de 4.500 millones de dólares en ventas perdidas en un trimestre, además de advertencias de un recorte potencial de hasta 8.000 millones. En el parqué, el levantamiento de trabas provocó un repunte superior al 4% en la cotización y nuevas previsiones alcistas por parte de varias firmas.
Regreso del H20 al mercado chino: qué implican las licencias
Por ahora, Washington no ha detallado cuántas licencias se han emitido, ni a qué clientes chinos se podrán enviar los chips ni el valor total de los envíos. En paralelo, las exportaciones de otros chips avanzados de IA de Nvidia siguen limitadas con el objetivo declarado de frenar desarrollos en defensa e inteligencia artificial en Pekín.
La cronología reciente ha sido especialmente volátil: el Gobierno de Trump prohibió las ventas del H20 en abril y la medida fue revertida en julio. Este procesador fue adaptado por Nvidia para cumplir con los requisitos de los controles vigentes bajo Biden, quedando como la opción legalmente viable para el mercado chino.
En el frente financiero, Nvidia llegó a advertir que las restricciones podían suponer un recorte de 8.000 millones de dólares en el trimestre de julio. Previamente había estimado un impacto de 5.500 millones, cifra que posteriormente ajustó en función de la reutilización de inventario originalmente previsto para el H20.
Con la nueva ventana para China, el H20 ya ha demostrado tracción: en el primer trimestre de 2025 generó 4.600 millones de dólares en ventas, y China aportó el 12,5% de los ingresos globales. Sin embargo, Nvidia advierte que el liderazgo podría resentirse si pierde cuota frente a rivales locales como Huawei Technologies.
El mercado ha tomado nota del giro regulatorio: tras el desbloqueo parcial, las acciones subieron más del 4% y varias casas de análisis elevaron pronósticos, con escenarios que contemplan ingresos trimestrales cercanos a 8.000 millones hacia finales de 2026, vinculados a la normalización del canal chino.
Exigencias de seguridad en China y respuesta de Nvidia
El Organismo de Vigilancia del Ciberespacio de China convocó a Nvidia el 31 de julio para aclarar si el H20 incorpora una puerta trasera de hardware que habilite funciones como el apagado remoto. En la esfera mediática, la cuenta Yuyuan Tantian (afiliada a la cadena estatal CCTV) cuestionó que los H20 no serían técnicamente avanzados ni respetuosos con el medio ambiente, además de advertir sobre posibles riesgos de ciberseguridad.
Nvidia ha rechazado de forma tajante que sus productos incluyan “backdoors” o “kill switches”, insistiendo en que no existen mecanismos de acceso o control remoto en estos chips. La compañía no respondió de inmediato a algunas solicitudes de comentarios, pero ha reiterado públicamente su posición en contra de integrar ese tipo de capacidades.
En la misma línea de presión, el People’s Daily solicitó a la empresa “pruebas convincentes” que despejen las dudas de usuarios y autoridades en China y ayuden a recuperar la confianza del mercado respecto al H20.
El debate supera el plano técnico. Varios expertos de seguridad creen que reanudar las ventas podría fortalecer capacidades militares y tecnológicas en China. Por su parte, Nvidia sostiene que endurecer aún más las limitaciones solo incentivaría el desarrollo de alternativas locales y aceleraría la independencia tecnológica del país asiático.
La recuperación del H20 en el mercado chino se produce en un contexto donde, a pesar de las restricciones, las ventas muestran claros signos de recuperación, y la compañía enfrenta simultáneamente desafíos relacionados con la seguridad y la confianza en Pekín. La evolución de esta situación determinará el equilibrio entre las restricciones regulatorias y las oportunidades comerciales para Nvidia en la segunda mitad de 2025.