Los juegos que se congelan en PS5 son un auténtico dolor de cabeza para los gamers. Nada frustra más que estar inmerso en una partida épica y, de repente, ¡pum! La pantalla se queda congelada y tu consola parece haberse convertido en un pisapapeles carísimo. Pero no desesperes, hay soluciones para este molesto problema que te permitirán volver a disfrutar de tus títulos favoritos sin interrupciones.
¿Por qué se congela tu PS5?
Antes de lanzarnos a la acción, es crucial entender qué puede estar causando estos congelamientos. Las razones pueden ser variadas, desde problemas de software hasta cuestiones de hardware. A veces, el culpable es un juego mal optimizado; otras, puede ser tu propia consola la que necesita un poco de TLC (Tender Loving Care, o cuidados cariñosos, para los no iniciados).
El sobrecalentamiento es uno de los sospechosos habituales. Si tu PS5 está en un espacio poco ventilado o acumulando polvo como si fuera una reliquia egipcia, es probable que esté sudando la gota gorda para mantenerse fresca. Y ya sabes, cuando las cosas se calientan demasiado, tienden a congelarse… irónicamente.
Problemas de software también pueden ser los responsables. Un juego con bugs, una actualización que no se ha instalado correctamente o incluso el propio sistema operativo de la consola pueden estar haciendo de las suyas.
Soluciones rápidas para descongelar tu experiencia
Ahora que tenemos una idea de qué puede estar pasando, vamos a por las soluciones. Empezaremos por las más sencillas y avanzaremos hacia las más drásticas, porque a veces lo simple es lo más efectivo.
Reinicia tu PS5
Sí, lo sé, suena a consejo de informático nivel principiante, pero no subestimes el poder de un buen reinicio. Apaga completamente tu consola, desenchúfala durante unos minutos (aprovecha para respirar profundamente y contar hasta diez) y vuelve a encenderla. A veces, esto es suficiente para que todo vuelva a la normalidad.
Actualiza todo lo que puedas
Mantén tu sistema y tus juegos al día. Las actualizaciones no son solo para añadir contenido nuevo; a menudo incluyen correcciones de errores que pueden solucionar problemas de congelamiento. Asegúrate de tener la última versión del software del sistema y de tus juegos.
Libera espacio en tu disco duro
Un disco duro a reventar puede causar todo tipo de problemas. Elimina juegos que ya no uses o mueve algunos a un disco duro externo. Deja al menos un 10% de espacio libre para que tu PS5 pueda respirar digitalmente.
Si las soluciones anteriores no han funcionado, es hora de pasar al siguiente nivel. Prepárate, porque aquí es donde las cosas se ponen un poco más técnicas.
Modo seguro: tu mejor amigo
El modo seguro de la PS5 es como ese amigo que siempre está ahí cuando las cosas se ponen feas. Para acceder a él:
1. Apaga completamente tu PS5.
2. Mantén presionado el botón de encendido hasta escuchar dos pitidos.
3. Conecta tu mando con un cable USB y pulsa el botón PS.
Una vez en modo seguro, tienes varias opciones:
Reconstruir base de datos: Es como hacer una limpieza de primavera para tu consola. Reorganiza todos los archivos y puede solucionar problemas de rendimiento.
Restablecer configuración predeterminada: Si sospechas que algún ajuste está causando el problema, esta opción te permite volver a la configuración de fábrica sin perder tus datos.
La última ratio: reinstalar el software del sistema
Si nada de lo anterior ha funcionado, reinstalar el software del sistema puede ser tu última esperanza antes de considerar opciones más drásticas. Es como formatear tu PC, pero para tu PS5. Asegúrate de hacer una copia de seguridad de tus datos guardados antes de proceder.
Cuidados preventivos
Una vez que hayas resuelto el problema, es importante tomar medidas para evitar que vuelva a ocurrir. Mantén tu PS5 en un lugar bien ventilado, limpia regularmente el polvo (con cuidado, por favor, no la trates como si fuera un cenicero) y evita apagar la consola de forma brusca.
Considera invertir en un buen sistema de refrigeración si vives en un clima cálido o si tu consola tiende a calentarse más de lo normal. Hay varios ventiladores externos diseñados específicamente para la PS5 que pueden ayudar a mantenerla fresca durante esas maratones de juego.
Si has probado todas estas soluciones y tu PS5 sigue congelándose más que el Polo Norte, es posible que estés enfrentando un problema de hardware más serio. En este caso, contactar con el soporte oficial de Sony es tu mejor opción. Sí, puede ser un fastidio, pero si tu consola está en garantía, podrían repararla o incluso reemplazarla.
Recuerda, la paciencia es una virtud, especialmente cuando se trata de tecnología. Con estas soluciones en tu arsenal, deberías ser capaz de combatir la mayoría de los problemas de congelamiento en tu PS5. Y si todo lo demás falla, siempre puedes considerar esto como una señal del universo para tomar un descanso y, no sé, leer un libro o algo así. ¿Quién sabe? Quizás descubras que el mundo exterior no está tan mal después de todo.